El pasado día 15 de julio, el grupo de Gente Pequeña 2 poníamos rumbo hacia lo que seguro será una de las experiencias más importantes de nuestra vida. Después, de dos años de formación, por fin, partíamos en Ave hacia Madrid, para comenzar nuestra aventura con destino al proyecto educativo St. Pius X Boy’s Town en Madurai, India.
Después de unas cuantas horas de viaje y dos aviones de por medio, por fin pusimos pie en la India.
Nuestro primer contacto fue con un “simpático” inspector de aduanas que nos preguntaba qué íbamos a hacer tantos días en una ciudad como Madurai. Tras una llamada de madrugada a los Hermanos de la India, por fin, pudimos cruzar la frontera y “disfrutar” de diez horas de espera en en el aeropuerto de Chennai, nuestra primera realidad directa con la India: música, olores, atuendos. Ya era una realidad, estábamos en la India.
El último vuelo de apenas una hora de vuelo nos trasladaba más al sur y llegábamos a nuestro destino, casi dos días después de salir de casa. Madurai es una ciudad al sur de la India donde los Hermanos de la Salle tienen un colegio y la casa provincial. Nada más salir del aeropuerto estaban los Hermanos Antony Doss y Paneer Selvam esperándonos con las manos abiertas y tres grandes jeeps que nos llevaron por unas curiosas carreteras indias hasta llegar al que es nuestro hogar: Boy’s Town.

Boy’s Town es un centro de educación profesional para jóvenes en situaciones desfavorables sociales o/y económicamente que reciben formación en este centro durante un año, que a muchos de ellos les permite salir con un trabajo y poder llevar adelante su vida con más perspectivas de futuro.
Al llegar todo fueron buenas sorpresas, una bienvenida por todo lo alto, visita a las diferentes instalaciones, cena de bienvenida y veinticinco chavales esperando nuestra visita y con muchas ganas de compartir muchos momentos juntos.
También nos enseñaron el que sería nuestro lugar de trabajo aquí: la residencia de San Benildo. Un edificio al que cambiaremos y elevaremos el tejado, y que se utiliza como centro de retiro y reuniones de todos los hermanos de India.
Los dos primeros días de trabajo consistieron en retirar todas las tejas de ambos lados y con ellas mejorar el pavimento del camino de entrada al edifico, ya que están hecha de adobe y con la lluvia y el paso fácilmente se deshacen dándole un tono rojizo.
Además tuvimos nuestra primera toma de contacto con los alumnos que aquí viven, el primer día nos enseñaron su casa y las pistas donde juegan y al día siguiente practicamos con ellos el deporte nacional en la India: el criquet.
Por último, también conocimos a muchas de las personas que trabajan en la Comunidad, como por ejemplo a Toby y a su hija Risita que es la empleada del hogar de los hermanos, el súper cocinero Dhian Rig  y nuestro capataz de obra y su ayudante Tangom.
Os seguiremos informando.
Gracias a todos los que nos apoyáis en esta experiencia.
Bárbara, Isabel, Sara, Luisa, Lucía, Pepe, Ana, Marta, María y Sandra.